Las diferencias entre personas de un mismo país se hacen visibles y dolorosas cuando sus políticas e instituciones no logran cuidar la vida como debieran. Hoy, como nunca antes, esas brechas parecen ensancharse al alero de un sistema más preocupado de proteger bienes económicos que la dignidad y felicidad de sus habitantes. El sistema de salud es un ejemplo patente de ello. Por eso, un conjunto de académicos y académicas de Fonoaudiología reclaman la urgente necesidad de refundarlo, basados en criterios de integralidad y dignidad capaces de entender la salud de otra forma.