El 8 de marzo se conmemoró otro Día Internacional de la Mujer Trabajadora, las calles de Valparaíso y de todo Chile se colmaron de pañuelos verdes, lienzos morados y, por sobre todo, de mujeres. Miles de nosotras, mujeres hartas, mujeres proletas, universitarias, obreras, secundarias, madres e hijas, abuelas y compañeras, todas juntas gritando NO MÁS VIOLENCIA, no más a este sistema heteropatriarcal, no más abusos, no más persecución, no más criminalización de nuestras luchas, no más represión del Estado, de las instituciones, de la academia y de todos y todas quienes siguen sosteniendo el orden que nos oprime cotidianamente, porque va a caer.
En este caminar, vuelven a hacer sentido las palabras de Julieta Kirkwood, en “Tejiendo Rebeldías”
Clandestinas de grito y de imagen,
atragantadas con exigencias de tripas y de alma,
mirando golpes, mirando muertes […]
Acá nosotras -ya indignadas-
de mundos, de procesos abiertos sacudidos de lo injusto.
Acá nosotras salidas de las casas,
¡Aire fresco!
Y juntas
¡Aire cálido!
Porque siempre nos hemos construido juntas.
Publicado el 21/03/2019.