Fiorella Lufi Guerra tiene 10 años y desde pequeña supo que la transición era parte de los movimientos que debía realizar para completar su vida. En este proceso, ha sido cuidadosamente acompañada y amada por su familia, amigas y amigos y sus profesores y profesoras, quienes han construido junto a ella el camino hacia su identidad. Frente a la elocuencia de las niñeces trans, es imposible no reflexionar en cómo avanzar en estas luchas. Todos, todas y todes tenemos luchas distintas, pero por nuestra parte es fundamental visibilizar de manera responsable y afirmativa las identidades trans y no binarias, relevar la importancia de actuar frente a las vulneraciones y comprender que esa fuerza y convicción que les moviliza resuena por sí sola, porque sus existencias son un acto de resistencia que nos inspira a seguir. Fiorella es representada en el jardín por la mariposa del chagual, lepidóptera endémica y la más grande de Chile.
Publicado el 14/03/2025.
